Su madre, Imelda Cruz, cuenta que llevó mucho esfuerzo que su hija, que ahora tiene 34 años, lograse su sueño. Isaura tiene trisomía 21, una anomalía cromosómica que causa el síndrome de Down en más del 90% de los casos.”Cuando estaba muy pequeñita, su padre le compró un teclado y tocaba con sus dos deditos. Llegamos a Cuautla, (estado de) Morelos, y empezamos a buscar un maestro para ver si le podían seguir dando algunas clases más que nada para que aprendiera a tocarlo”, relata la madre.